ESPECIAL BANYOLES: 27-5-2023

RECORREGUTBanyoles, Esponella, Crespia, Mare de Deu del Mont, Beuda, Besalú, Serinya, Banyoles, Rocacorba, Banyoles.

SORTIDA: a les 8,00h. desde Banyoles (parking Pabelló de la Draga) https://goo.gl/maps/vL9fgDviUf9DYzTp6 . 99 Qm. / 2.200 mts.

Primera especial de la temporada del Grup A. Un día espléndido (incluso demasiado calor en la parte final). Nos juntamos 14 para hacer esta salida. A destacar: un super miembro del B22 al que nos encantó volver a ver (Josep María Bordas) y dos invitados de lujo (Manel y Óscar). Lástima que Lluis Colominas finalmente no pudiera venir. Y a destacar también, el reencuentro con Jaume, al que esperamos ver el próximo sábado en la segunda especial, propuesta y diseñada por él.

Salimos super puntuales. A las 8,02 marcan los gps. Bravo.

Rodamos agrupados los primeros 15 kilómetros. En general, salvo algún pequeño repecho, carretera bastante cómoda. En cuanto cogemos el desvío a la izquierda, que pone Mare de Deu, Sebas dice (en realidad no pierde el tiempo en andar diciendo nada) que empieza el segmento, la cronoescalada, y sale como una flecha. Pero, oh, hoy se encuentra con: es un pájaro, es un avión, no… es Manel. Ellos, a su película, con Jaume no mucho más atrás y los demás, como es habitual en un largo rosario de a uno o de a dos. Desde ese desvío, son 18,5 kilómetros. Los primeros 8 más cómodos y los 10,5 siguientes, ya bastante más duros. La temperatura es cálida pero no agobiante, así que por ese lado se sube bien. Pero tantos kilómetros de puerto lo convierte en un HC. Aún con la larga distancia y dureza, las diferencias de tiempos no son muy grandes, como viene siendo habitual en el grupo.

Poco a poco vamos coronando todos y todas (Inma, pero vale por varias). En la cima nos está esperando una nube de mosquitos (en Rocacorba fue peor). Las vistas son espectaculares, a un lado y al otro. Lástima de un poco de bruma. Hacemos la foto de rigor y bajamos, que ya tantos mosquitos son molestos.

De bajada, una primera parada en una fuente de agua fresquita y podo después, en el desvío (cuesta verlo) a la derecha que baja hacia Beuda y Besalú. Los primeros kilómetros de bajada son estrechos, con curvas y bastante gravilla, así que hay que tener cuidado. Pasamos por Beuda y desde la carretera se puede ver su preciosa iglesia románica del siglo XI. Hoy seguro todos la vieron 😉

Continuamos bajando ligeros hasta llegar a Besalú, donde decidimos parar. Básicamente para que algunos bajen de la bicicleta y puedan ver de verdad la preciosa estampa de Besalú: el puente, el pueblo. Aunque ya de paso aprovechamos para tomar una bebida fresca (hay quien consigue tomar la bebida, un bocata y un café, en tiempo récord).

El calor ya aprieta, sobra toda la ropa. Tras estas últimas semanas (solo en Granera tuvimos algo de calor) no estamos aclimatados. Afortunadamente, esta parte es rápida, aunque con algunas trampas, hasta llegar a Banyoles. Entramos por Porquera y rodeamos el lago por el lado contrario a donde están los coches, para variar y para que nadie tenga tentaciones de quedarse ya allí y no subir el segundo puerto de la jornada. A René le tapamos los ojos porque dice que desde ahí ve el coche de todas formas. Incluso cree que el perímetro del lago es de apenas 1 kilómetro (es de 7 km.). Creemos que ya le está afectando el calor o es lo rápido que ha hecho las subidas. Ha sido top 5 en las dos subidas. Bravo.

Una vez que acabamos de rodear el lago, salimos de Banyoles y, poco después, giro a la izquierda y ya enseguida comienza Rocacorba 10,8 kilómetros. Un primera, por no tener unos pocos kilómetros más, que no por su dureza. Especialmente, desde poco más de 5 kilómetros a la cima, con medias sostenidas de 10,5% un kilómetro, seguido de 2 kilómetros al 9%. Después un kilómetro de descanso, para afrontar el kilómetro y medio final, otra vez al 10 y pico de media. Muy duro, y más con el calor que hacía. Menos mal que encontramos varias zonas de sombra. Dos compañeros (Josep María y Víctor) no pueden acabar de coronar porque se les hace tarde. Los demás, vamos llegando poco a poco a la cima, hasta la valla en donde termina la carretera, que recuerda a la de la bola del Rat Penat, dando también acceso a las antenas de telefonía. No llegamos con fuerza suficiente para acelerar la bici y saltarla, así que tenemos que conformarnos con terminar allí. 

En cuanto llegamos todos, hacemos la foto de rigor y bajamos sin más esperas porque la nube de mosquitos es mayor que en Mare de Deu y muy molesta. Impresionante Óscar que consigue coronar a pesar de los calambres en la parte final. Al llegar casi no puede bajarse de la bici y se tiene que tumbar a estirar. Aunque ahí ya no sabemos si es de verdad o es una excusa para que Pitu le haga esos masajes que se han hecho famosos y muy demandados. 

Bajada con cuidado, porque la carretera tiene diversos agujeros y zonas agrietadas. Parada en la Masia de las bebidas (genial la idea y confianza, con lo de poder dejar el dinero o mandar un bizum, etc.), aunque varios no tenemos muchas ganas de parar con tantos mosquitos y ya preferimos seguir hacia los coches.

Finalmente, llegada a los coches y despedidas. Gran día de ciclismo. No llegan a los 100 kilómetros pero con casi 2.200 de desnivel y dos tremendos puertos.